Te ha pasado que cuando te llevas una decepción del porte de un planeta, que te aplasta la cabeza, te quedas helada, te das la media vuelta & caminas lo más rápido posible, como si intentaras desaparecer de ese lugar. Te ha pasado antes, pero no siempre & cuando ocurre siempre crees que es peor que la anterior, ya que la estocada esta fresca & a la vez caliente de emociones. Sientes como tu mente trabaja a la velocidad de la luz, intentando estar en blanco, con el corazón que te retumba en los oídos como a punto de explotar, con el estomago en el aire, que a veces pareciera que va a desaparecer & con un nudo enorme en la garganta como si te hubieses tragado una pastilla que se quedo atrapada.
Eso sentí hoy. La verdad olvide lo que se sentía antes. Lo viví & lo mejor que pude hacer fue llegar luego a mi casa sentarme en mi cama & llorar como una niña. Ahí te retomas la vieja decisión de estar siempre preparada a este tipo de cosas, aunque la realidad sea lo contrario. Lo cual es natural.
